Desvísteme, escribe en el viento aquello que no soy y plasma sobre mi espalda lo que somos. Dibujame el rostro que no conoceré en la nuca, para tener la certeza de que en algún lugar está esa parte de tí que me faltará el resto de mis días. Toma el vaso que dejé sobe la mesa, ahí dejé las lagrimas que brotaron esta mañana cuando no acepté que no eres mío y que me enamoré de una imagen que tendré que modificar para seguir amándote, pruébalas y espero puedas beberlas sin escupir tu fachada. Mas no nos detengamos tanto, sigue impresionandome en mi pequeño mundo de cristal, que no se romperá mientras no enciendas la luz y me digas que te vas, sigue escribiendo sobre mí las caricias que no serán mias a menos que sean tuyas primero.
Es cierto, falta el pantalón no es fácil de omitir, es la prueba de que aún tenemos obstáculos por eliminar...permite que te ayude, entre tanto sigue contándome las noches de pasión y las mañanas de ternura que podría tener si tan sólo desearas satisfacer algo más que tu ego. ¿Se nota que te amo? ¿Se nota que puedo ser tu lienzo, tu descanso, tu respiro y tu entre tanto? si acaso se nota enciende la luz, gira tu mirada hacia mi frente y olvida la pared, dime si vale la pena seguir imaginando las letras que pintas en mi espalda, dime si seré algo más que palabras y deseos enfrascados, de no ser así apaga la luz y dejame seguir soñando.
